viernes, 21 de diciembre de 2012

Chamusquina.

Cuando te sientas en el sofá de Don Pecas & Cía., el tiempo no transcurre como es habitual: los segundos se alargan si tienes prisa para que no se quede ninguna palabra por decir, ni ninguna cabezadita por echar, y las horas se acortan cuando hay demasiada calma.
Yo había perdido la noción de ese tiempo y justo cuando he sido consciente de ello, y sólo entonces, han regresado mis queridos amigos.
Tras los saludos de rigor, les he contado lo de mi nube-carta y les he hecho partícipes de mis sospechas. Pero lo cierto es que no parecían saber nada al respecto. Cía. ha dicho: "¡miau!",  aunque no es de extrañar, porque ella siempre dice miau...
Todos juntos hemos ido a mi casa para contemplar el fenómeno y ¡oh sorpresa!, ambos han empezado a reírse a pierna y pata suelta, respectivamente, en cuanto lo han tenido delante.
¿Recordáis el día que Don Pecas & Cía. decidieron hacer el indio? Pues  parece ser que también hicieron una gran fogata que utilizaron para enviar ¡mensajes con señales de humo!
Ya decía yo que esto olía a chamusquina...
Cía. se ha lanzado sobre la nube para rasgarla y el humo de su interior ha comenzado a formar la palabra "jau", que en indio de toda la vida viene a significar "¡hola! ¿qué tal? ¿cómo te va la vida, rostro pálido?"

No hay comentarios:

Publicar un comentario